Nada en el cosmos es casual ni aleatorio, incluso en sus zonas más caóticas todo parece estar métricamente previsto y orquestado. Una prueba de ello son los planetas, siguiendo los patrones de sus movimientos y órbitas encontramos perfectas formas geométricas, una maravilla más del Arquitecto del Universo.
A medida que los planetas se mueven alrededor del sol, tejen espectaculares interacciones entre sí. Venus traza un pentagrama alrededor de la Tierra consistentemente cada ocho años.
La luna misteriosamente cuadra el círculo en su orbita a la tierra.
La órbita de Saturno invoca pi 3 144... y el radio de Saturno es la circunferencia de las órbitas de Marte .
Júpiter y Saturno demuestran una rara relación : se unen conjunto cada 20 años formando un pentagrama, y sus oposiciones cada 10 años forman la estrella de David.
Urano y Saturno, cada 4,300 años experimentan una división perfecta del zodiaco en veinticinco conjunciones.
Los exquisitos patrones orbitales de los planetas se amplifican por los sonidos que hacen mientras se acercan alrededor, por eso los pitagóricos hace 2,500 años lo llamaron La Música de las Esferas.
Imagenes: John Martineau
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